El gobierno del presidente salvadoreño Nayib Bukele negoció en secreto una tregua con los líderes de las poderosas pandillas callejeras del país, anunció el Tesoro de Estados Unidos el miércoles.
El gobierno estadounidense alega que el gobierno de Bukele compró el apoyo de las pandillas con beneficios y privilegios financieros para sus líderes encarcelados, incluidas prostitutas y teléfonos celulares. Esta acusación explosiva apunta directamente a uno de los éxitos más pregonados por Bukele durante su mandato: una caída en la tasa de asesinatos.
La oficina de Bukele no comentó de momento a una solicitud de comentarios, pero el presidente respondió con sarcasmo por Twitter. “¿Celulares y prostitutas en las cárceles? ¿Dinero a las pandillas? ¿Cuándo pasó eso? ¿No revisaron ni la fecha? ¿Cómo pueden poner una mentira tan obvia sin que nadie se las cuestione?”.
Bukele negó con vehemencia la acusación cuando fue reportada en agosto de 2020 por el sitio de noticias local El Faro. Y el miércoles aludió a una tregua de pandillas negociada por una administración anterior por la que varios exfuncionarios están siendo procesados.
El Tesoro de Estados Unidos hizo el anuncio junto con el de sanciones financieras a dos funcionarios del gobierno de Bukele.
En 2020, el gobierno de Bukele “dio incentivos financieros a las pandillas salvadoreñas MS-13 y Barrio 18 para garantizar que los incidentes de violencia pandillera y el número de homicidios confirmados permanecieran bajos”, dijo el comunicado del Tesoro. “A lo largo de estas negociaciones con Luna y Marroquín, la dirección de las pandillas también acordó dar apoyo político al partido político Nuevas Ideas en las próximas elecciones”.